Páginas

domingo, 22 de marzo de 2020

Reseña: Halse Anderson, Laurie "Frío"

Frío
Laurie Halse Anderson



Sinopsis:  
No debo comer. No debo comer. No debo comer.
Esta es la frase que Lía se repite constantemente. En su vida sólo hay sitio para contar las calorías, y para hacer ejercicio cuando la han obligado a ingerir una cantidad de alimentos que ella considera excesiva. Siempre. Pero ahora su amiga Cassie, con quien llegó al terrible pacto de convertirse en la más delgada del instituto, ha muerto y la persigue en sus sueños porque se la quiere llevar con ella, no quiere estar sola al otro lado.
Lía tiene una oportunidad: puede aceptar la ayuda de aquellos que se la ofrecen, sus padres, su hermana pequeña; puede aceptar el consejo de los médicos; pero no será hasta que haya tocado fondo que pueda recobrar la ilusión por una vida que se le escapa de las manos.

Voy a confesar que le tenía cierto miedo a este libro, creí que no me iba a gustar, lo compré de segunda mano porque estaba muy bien de precio pero después no paré de verlo en tiendas de libros usados y cuando un libro aparece tan a menudo en tiendas de libros de segunda mano suele ser mala señal. 

Pero me equivoqué. En realidad no sé por qué la gente se deshace de él, bueno, en realidad lo puedo intuir porque no es que la gente en Internet le suela hacer justicia a libros bien escritos, muchas veces van a la caza de una bonita portada y esperan ver dentro un libro comercial y poco más. 

A mí me encantó. El libro va sobre anorexia, lo dice en la contraportada por lo que no es para nada un spoiler y además trata esta enfermedad desde dentro. Estamos excesivamente acostumbrados a que nos muestren la enfermedad desde fuera, a ver a la chica delgada que se siente gorda y que no quiere comer y poco más y eso sí que es la realidad pero es una parte tan diminuta de la realidad que no podemos seguir así porque esas personas están necesitando nuestra ayuda, la piden a gritos y les puede suceder lo que a las protagonistas de esta historia, que sí, es ficticia pero podría ser verdad. 

El libro cuenta la trama desde el punto de vista de alguien privado de comida y no sé si habéis pasado alguna vez muchas horas o muchos días sin comer pero tiene unas consecuencias muy inmediatas y muy graves tanto a nivel físico como a muchos otros niveles: cognifitivo, afectivo y psicológico por nombrar algunos. ¿Qué sucede? que la autora lo ha reflejado muy bien. 

En muchos momentos, la protagonista se ve confundida por la falta de glucosa y ves tachones entre las palabras del libro porque efectivamente así es como piensa una persona privada de comida, primero piensas una cosa y luego la vuelves a pensar pero finalmente la piensas de nuevo y acabas decidiendo que deberías haberla pensado porque si pensaste que la estabas pensando... en qué estaba pensando... ¡ah! ya me acordaré. 

Eso es lo que encuentras en el interior del libro y es absolutamente genial porque es exactamente así como te sientes. Y lo sé porque así es como me sentí yo. 

No es que me lo imagine porque me ponga en la piel de la protagonista, es que yo he padecido un desorden alimenticio y es una verdadera tortura para quien lo sufre, no es que no tengas apetito, verdaderamente te mueres de hambre, te mueres literalmente de hambre. Te mueres. Como la mejor amiga de la protagonista que está muerta desde la primera página. 

La autora ha hecho una importantísima labor de investigación y documentación, se nota, lo transmite muy bien y a mí me ha encantado. Conforme vas leyendo te va reflejando la angustia, el desconcierto... realmente te hace sentir exactamente como se siente la protagonista. Y ahí es donde quiero retomar el inicio de mi reseña porque muchas personas que leyeron este libro no lo entendieron, no comprendieron la intención de la autora. Si ella hubiera querido escribir un libro cualquiera se habría limitado a imitar cualquier historia de lágrima fácil de "pobrecita la flacucha anoréxica" pero es que no se trataba de eso, se trataba de reflejar la realidad cruda y pura y lo ha hecho genial. 

Es un libro muy duro y con mucho significado, tiene una carga emocional muy fuerte, es un espejo en el que mirarse si has pasado la enfermedad, un amigo en el que apoyarse si estás pasando por ella y por supuesto un empujoncito si aún no has pedido ayuda porque te muestra las terribles consecuencias de lo que te podría suceder si no reclamas ayuda a tiempo, fíjate, la mejor amiga de la protagonista, al inicio del libro ya está muerta y no, ni las personas reales ni los personajes ficticios pueden resucitar así que, lección aprendida. 

No sé por qué hay tantos ejemplares de este libro de segunda mano sin dueño aún pero si encuentras uno, hazte con él, a mí me parece que es muy buena elección, quizás no apto para todos los estómagos y no del gusto de cualquiera pero ahí está la buena literatura, que no todos la saben valorar. Si esperabas unicornios y nubecitas de algodón, te equivocaste. Si querías realismo y verosimilitud, será un gran acierto.  

¿Te gusta? Cómpralo haciendo click aquí.

2 comentarios:

  1. Hola!!
    Apúntado!! Está muy interesante y me dejo muy intrigada, gracias por la reseña.
    Besos������

    ResponderEliminar
  2. Buenas me lo apunto eso de saber las cosas como pasan desde dentro sirve para conocer mas sobre el tema , los temas duros y reales hay que saberlas aunque sea doloroso .

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.