¡Como siempre feliz domingo a todas!
Para mis lectoras cartageneras, todas sabéis lo que significa "La ruta de las fortalezas" pero para el resto os haré un breve resumen: desde hace unos 4 años, Cartagena celebra un sábado al año una ruta muy especial, organizada por el ejército, junto a la policía, protección civil y muchos voluntarios, en la cual los participantes recorren a pie (andando o corriendo) 51 km a través de subir y bajar los 6 montes de Cartagena con sus 6 fortalezas, es decir, antiguos castillos y baterías que actualmente están en desuso y se pueden visitar turísticamente hablando.
Una vez que a todos nos ha quedado más o menos claro cómo funciona os contaré mi experiencia, sentada en mi escritorio con agujetas en las piernas en este domingo de descanso. Ayer madrugué para participar en esta locura. Comencé muy bien, contenta y animada, pues es la primera vez que participo y ahora que ya ha terminado, puedo afirmar que me encantará participar de nuevo en los próximos años.
Es una prueba dura pero a la vez, una experiencia muy bonita. Se necesita estar en buena forma física, entrenar y poseer un equipamiento adecuado: calzada, prendas de ropa cómoda y que protejan del sol.
Para mí ha sido muy gratificante aunque debo admitir también que no terminé la carrera, ni me lo había planteado. Para alguien que no ha estado entrenando semanas antes, 51 km son demasiados para un sólo día. Yo he hecho casi 40 y ya era mucho más de lo que me había propuesto hacer, pero estaba muy animada, me encontraba físicamente bien y decidí seguir. Una vez más, puedo decir con la boca bien grande que he conseguido superar otra de mis metas. No está nada mal.
La gente ha sido muy amable, no sólo los organizadores y voluntarios que nos animaban siempre, sino los compañeros que se ayudaban entre ellos en todo momento y hacían muy agradable la marcha. Había suficientes puntos de avituallamiento, con fruta, agua, zumos y muchas cosas más. Estaban marcados los kilómetros por un cartel por cada tramo de 5. Y sobre todo, lo que más tenemos que agradecer es que el tiempo nos acompañara, hemos tenido una máxima de 15 grados, con el cielo nublado, algo de viento en los puntos más altos, sombra todo el camino y por eso hemos aguantado tanto. La ausencia del sol, en este caso, se ha agradecido mucho.
Y por último, como anécdotas graciosas os comentaré que algunos participantes llevaban camisetas con frases del tipo: trote cochinero, publicidad de sus negocios y casi todos íbamos vestidos con ropa de Decatlón. Lo que me hacía pensar todo el rato en frases como: espacio patrocinado por: Kalenji y Reflex.
Espero que todos lo pasaran al menos la mitad de bien que yo, y que estas agujetas se vayan lo antes posible. Y ahora os dejo con las fotos que demuestran mi hazaña. ¡Feliz domingo!